jueves, 30 de diciembre de 2010

DALE QUE VA

La propuesta ocupa una parte de ese espacio conocido como Impa, la fábrica recuperada que va ganando cada  vez más lugar en una ciudad donde recuperar lugares se está convirtiendo en parte de la propia idiosincrasia (por suerte).
Tres hombres: un músico integrado como performer y dos bailarines, son los que dan cuerpo y espíritu a Va. 

En uno de los pisos de la fábrica a la que el público accede prácticamente a oscuras, se produce el intercambio entre actor y espectador. Este es ubicado en un extremo de la sala donde se pondrá en juego el movimiento. Los intérpretes se introducen en  penumbras y van ganando terreno junto a la iluminación que los acompaña y colabora para perfilar a esas formas que se mueven en la escena.
Dos hombres en estado animal se presentan, desarrollan una especie de evolución de insecto, saliendo de sus crisálidas y tomando nuevas formas. Entre ellos se produce un encuentro que es lúdico unas veces y competitivo otras. Bailan juntos o combaten. Parece hasta nacer una histeria femenina en el juego, donde van y vienen, se persiguen, se abrazan, se pegan, se corren.
Es una danza de hombres. Es una relación entre hombres. ¿Cómo es el amor entre hombres? ¿Cómo podría expresarse en toda su complejidad masculina sin definirse ni catalogarse? ¿Cómo se baila esa expresión?
Ellos vuelcan toda su energía en la danza, en el intercambio. Entre la música y los bailarines, entre los interprétes que danzan. La música llena la austeriad espacial con su bella creación, al igual que las luces, ideadas con sensatez y astucia.
El espacio es abarcado en toda su extensión, dejando un poco descuidado al espectador que por su ubicación se pierde parte de la propuesta, siendo obstruida su visión por algunas columnas de la sala.
Los bailarines despliegan un nivel de compromiso profesional que solamente en una parte se ve un poco abandonado. Sucede con la inserción de un momento delirante que parece un desfile donde los intérpretes compiten hasta llegar al contacto físico agresivo (aunque parodiado) y que, si bien le da un aire bizarro a la propuesta, se ve algo desaliñado en relación a lo que vienen construyendo.
Por lo demás, es para disfrutarla y compartirla.

Qué: Va

Quién: Intérpretes: Ramiro Bailiarini, Emiliano Formia.-Músicos: Daniel Figueroa.- Vestuario: Johanna Braña.- Diseño de luces: Mariano Arrigoni.-
Diseño sonoro: Daniel Figueroa.- Fotografía: Ailin Formia.- Asistencia de dirección: Mariana La Torre.- Coreografía: Ramiro Bailiarini, Mariana Carli, Emiliano Formia.- Dirección: Mariana Carli

 www.va-nov2008.blogspot.com

VOLANDO CON FRIDA KAHLO

 Esta propuesta de danza parte de un proyecto de la compañía Nandayure CIA de Danza a partir de un proceso de investigación sobre la vida y obra de la artista mexicana Frida Kahlo. Según la gacetilla del grupo, la idea es “generar un espacio de información y arte, interrelacionando la proyección de un documental informativo, la exposición de trabajos realizados por diferentes artistas plásticos, fotógrafos y escritores”, con el fin de darle al publico pistas de cómo se construye esta mujer, artista, mito.

La obra pone en escena a una intérprete -la bailarina y maestra Liliana Cepeda- que le da cuerpo a Frida a través de intervenciones performáticas y deslizamientos entre los bailarines. Ella es la protagonista y ellos son como una expresión de su vida y su dolor materializados en la composición coreográfica.
Puesta en movimiento por un grupo de doce bailarines que despliegan sus habilidades técnicas en frescas composiciones, la propuesta habla del lugar del dolor que habitó a la artista y se proyectó en su obra. Pero no se trata de ahondar en el dolor para quedarse allí, sino de tomar impulso desde el sufrimiento para continuar construyendo y creando.

Las coreografías hacen bailar al ojo que va siguiendo los movimientos suaves de las composiciones, intercaladas con las apariciones de la figura de Frida, que hila las escenas como el hilo que teje el dibujo en un telar. Así esta compañía hace disfrutar de la construcción de una obra que rescata la trayectoria de una artista mexicana. También sumerge al  espectador en la atmósfera folklórica de México a través de las músicas, que con su mezcla de nostalgia, alegría y resignación, transmiten el aire que ese país latinoamericano proyecta desde sí. Una poesía idiosincrática llena de historias.

Qué: Pies pa' Volar
                                                         

http://www.piespavolar.blogspot.com/`
Dónde: EL CUBO.- Zelaya 3053.- 4963-2568

Cuándo: Sábado - 21:00 hs.-