martes, 12 de septiembre de 2017

LOS HUESOS

Las maneras en que un artista nombra su obra pueden señalar por donde va su pensamiento. Por eso, la interpretación de quien participa como observador puede partir de un título.
Las reflexiones que siguen a continuación surgen a partir de esta propuesta que presenta Leticia Mazur.
Los huesos son el sostén del cuerpo, la estructura profunda, sólida y a la vez flexible, viva. Son también lo que queda de un ser cuando los otros tejidos se descomponen. Fragmentos desde donde recordar, o desde donde poder reconstruirlo.
Los huesos contienen en sí mucha información sobre una identidad.
La pieza comienza.  La luz asciende como el día, como una alusión al principio de la humanidad, como el fuego que reúne a la tribu. Se condensa en esta primera imagen una especie de ritual primario en el que los cuerpos desnudos contemplan la luz antes de moverse.
Los movimientos de uno son reflejados por otros en un sinfín encadenado donde se observa cómo el impulso viaja de un intérprete hacia otro.
Al principio, estos cuerpos parecen sostenidos por hilos invisibles que los reúnen en un todo variado y en contacto.
Los diferentes cuerpos se transmiten energía, se articulan y sacuden, se desplazan ampliando el territorio, generando un tipo de comunicación.
El cuerpo desnudo se entrega, se ofrece desvalido en toda su potencia. Sin haber un desarrollo respecto a cuestiones genéricas, el sexo se muestra en su pluralidad, y eso ya es una posición sobre el asunto.
También surgen en ese imaginario que construyen los cuerpos y la luz, escenas que desarman creencias, estigmas, credos, religiones. O que las emulan, las trazan apenas, para disolverlas después.
Entre los movimientos que aparecen, se ven los gestos de sacar y poner, de repetir una tarea, dando lugar a que se vea el cuerpo como herramienta de trabajo, así como alguna vez fueron utilizados los huesos por la humanidad.
A la vez, sobrevuela cierta idea de mecanización, de industrialización, de los sistemas de control del cuerpo en el encierro con una actividad fija y constante, de producción fabril. De alienación.
Frente a esto es que nace el gesto del puño en alto como protesta.
El cuerpo es productor de formas, de imágenes, de ideas.
El magnífico mecanismo de la luz diseñado por Matías Sendón es central y sobresale en esta propuesta. Más allá de cualquier metáfora lumínica que lo vincule al fuego, al centro de reunión, al conocimiento, a la iluminación.  Genera espacio, se cuela en la propuesta como estructura conceptual, siendo herramienta, hueso sólido que da eje al espacio, concreto, flexible y sostenedor.
También proyecta sombras y construye alegorías de cavernas, jugando con la ilusión y lo real.
En ese estado puede encontrarse la mente cuando observa tantas imágenes de movimiento convertirse en metáforas. Como proyecciones de ellas mismas.
Y aquello que se proyecta es lo que queda cuando lo otro se va.
Como los huesos.

Qué: Los huesos
Quién: Actuación: Lucas Cánepa, Ana D´orta, María Kuhmichel, Valeria Licciardi, Gianluca Zonzini.- Iluminación y Diseño de objetos: Matías Sendón.- Teaser y Grafica: Ian Kornfeld.- Música: Patricio Lisandro Ortiz.- Fotografía: Ariel Feldman.- Asistencia de dirección y Producción: María Laura Santos.- Dirección: Leticia Mazur.-
Dónde: El Galpón de Guevara - Guevara 326 Chacarita
Cuándo: martes 7,14, 21 y 28 de noviembre - 21:00 hs - 

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